Mi columna de este mes en el portal de ingeniería
(http://www.portaldeingenieria.com/columnas/detalle/46)
Es un hecho que en muchos de los
proyectos que participamos debemos trabajar con proveedores y es un
hecho también que el trabajo de dichos proveedores debe ser monitoreado,
sin embargo ¿Cómo monitorear algo cuando no tienes información?
Podemos contar con proveedores muy capaces en los aspectos técnicos,
pero cuyo punto débil es justamente la comunicación oportuna. Para
ejemplificar este tema les pondré un ejemplo doméstico que me ocurrió
recientemente.
Un proveedor se comprometió a realizar un trabajo específico de pintura
en una fecha específica. Llegada la fecha pactada no inició los
trabajos y tras comunicarme telefónicamente con él, me indicó que había
tenido una situación de emergencia, lo cual pude comprender y le
solicité que me indicara la nueva fecha en que podría realizar el
trabajo. En ese momento me indicó que se iba a comunicar conmigo para
confirmarme la nueva fecha y hasta aquí la situación no pasaba más allá
de una pequeña incomodidad, dado que no era un trabajo urgente. Sin
embargo pasaron los días y tras reiteradas llamadas no obtuve ninguna
respuesta por parte del proveedor, hasta que 10 días después se apareció
en la puerta de mi casa con todos los implementos necesarios para
iniciar el trabajo. Pueden imaginar que en esta ocasión la falta de
comunicación si me causaba molestias, dado que ya tenía compromisos
adquiridos para ese día y tuve que recurrir a la ayuda de familiares que
felizmente pudieron acudir a mi casa para dar las facilidades y
supervisar los trabajos.
Todo lo anterior pudo haberse evitado con una simple llamada telefónica.
Si vemos los resultados, debo reconocer que el trabajo de pintura es
bastante bueno, pero esta falta de comunicación pone en serias dudas si
en un futuro volvería a trabajar con dicho proveedor.
Lo anterior es un caso muy simple, y sin graves consecuencias, pero que
sucede cuando esto mismo lo llevamos a un nivel de proyectos complejos y
el proveedor presenta alguna dificultad que no le comunica al cliente
oportunamente o si se ve imposibilitado de cumplir con el cronograma
establecido. Desde el punto de vista contractual, podremos incluir
informes requeridos e incluso penalidades de diferente índole, pero en
la práctica una comunicación oportuna constituye la clave para realizar
ajustes a la planificación y es esta transparencia y comunicación
continua la que fortalece las relaciones de confianza entre cliente y
proveedor.